
Ya no sabemos vivir sin internet. Lo utilizamos para todo. Para ver tiendas, para comunicarnos con nuestros amigos, para trabajar, para informarnos sobre cualquier cosa, para perder el tiempo… y hasta para hacer la compra en el supermercado de la esquina. Por eso no es de extrañar que cada vez tengamos mayores facilidades de acceso a la red. ¿Pero qué ocurre cuando nos quedamos sin datos o nuestra señal de conexión no llega hasta el lugar donde nos encontramos? Hoy en día pueden encontrarse redes de internet inalámbrico en casi cualquier parte. Por eso resulta muy goloso utilizar una red de otra persona para conectarnos sin su permiso. Sin embargo, robar wifi en España es un delito. Veamos por qué y cómo actuar en estos casos.
Qué tipo de delito sería robar wifi
Una conexión a internet a través de un sistema wifi consiste en una señal inalámbrica que permite la conexión a la red sin necesidad de utilizar cables. Esa es su principal ventaja y su mayor debilidad. Por tanto, una red wifi no está delimitada por un cable, sino que se expande en el espacio en todas las direcciones. Acceder ilegalmente a una de estas redes wifi sin permiso es más sencillo de lo que parece. Con muy pocos recursos se puede iniciar un ataque a la red de un vecino y también de cualquier persona, o entidad Seguro que alguna vez has experimentado una velocidad de conexión lenta o has comprobado que algunas páginas no se cargaban correctamente. Podría ser un problema técnico puntual, pero también un acceso no autorizado a tu conexión a internet.
Pero en este caso no se está sustrayendo nada físico. ¿Qué clase de delito es robar wifi? El Código Penal prevé este tipo de conductas ilícitas en los artículos 255 y 256. Así, se castiga a aquel que comete un fraude utilizando energía eléctrica, gas, agua, telecomunicaciones u otro elemento, energía o fluido ajenos, por alguno de los medios previstos en esta normativa. También comete un delito aquella persona que utilice cualquier equipo terminal de telecomunicación, sin consentimiento de su titular, y causando a éste un perjuicio económico. Las penas consisten en multas cuya cuantía varía en función de la cantidad defraudada, aunque demostrar la cantidad de señal robada no es una tarea sencilla. Por lo tanto, queda claro que robar wifi es ilegal y es denunciable.
¿Existen sentencias en España que condenen robar wifi?
Ponerle puertas al campo es complicado. La legislación española avanza a un ritmo mucho más lento que las nuevas tecnologías. Por ello a día de hoy todavía no existen demasiadas sentencias que condenen la conducta punible de robar wifi. No obstante, encontramos la primera de ellas en 2014, en la que un joven fue encausado por descubrimiento y revelación de secretos, además de acoso a menores, utilizando la conexión a internet de sus vecinos.
Qué hay que hacer si te están robando Wifi
A nivel legal, se ha de tomar nota de las direcciones MAC que han tenido acceso a nuestro router. Una dirección MAC es un identificador único de cada dispositivo en red. Después tendremos que personarnos en una comisaría, donde se pondrá en conocimiento de la policía esta defraudación para que se inicie el procedimiento por la vía administrativa o la penal. Eso sí, es importante tener en cuenta que, para poder denunciar, nuestra red wifi tiene que estar protegida con una contraseña.
Protege tu señal wifi
Lo primero que hay que hacer para proteger nuestra señal de internet es detectar que alguien te está robando wifi. El procedimiento es muy simple. Se pueden instalar ciertos programas gratuitos desde el ordenador que rastreen nuestra conexión. Sin embargo, una de las formas más sencillas es utilizar una aplicación en el móvil que detecte quién está usando nuestra red wifi. Ahí aparecerán todos los dispositivos conectados a tu red de internet, así como sus direcciones IP. Si aparece algún aparato que no reconozcamos tendremos que seguir los pasos que indica la propia aplicación para denegar el acceso al dispositivo intruso.
Para evitar un robo de wifi lo más recomendable es proteger nuestra señal con una contraseña segura. Además, también se debería acceder a la dirección del router desde el navegador a través de las direcciones 192.168.1.1 o 192.168.0.1, dependiendo del aparato y el proveedor de servicios de internet. Una vez introducido el usuario y la contraseña, esta se podrá cambiar por una nueva. Por otro lado, los expertos recomiendan ocultar el nuevo SSID y también desactivar la opción de WPS, para impedir que los extraños no deseados puedan hacer uso de nuestro wifi.